Entre dunas casi infinitas, la ciudad de Sharjah se abre al visitante ofreciendo fantásticas experiencias. Comenzando el recorrido por el paseo marítimo de Al Majaz, el huésped puede descubrir algunas de sus construcciones más imponentes, tan características del Medio Oriente. El escenario de un espectáculo de luz que por la noche se une a la gran oferta de ocio y gastronomía disponible para toda la familia.

Algunas de las principales atracciones de esta ciudad, como la Mezquita Al Nur, son una fabulosa muestra del estilo y la tradición islámica patente en ésta y otras ciudades como Abu Dabi, la más poblada de la federación. Se trata de un destino lleno de contrastes en el que podemos visitar desde el Centro de fauna de Arabia, situado en el Parque del Desierto, o su Acuario, famoso por sus arrecifes de corales y manglares. 

Su sistema de transporte público ofrece así mismo una excelente conexión con algunos de los puntos más importantes de los Emiratos Árabes. Entre ellos el aeropuerto de Dubái, ubicado a 15 minutos del centro de Sharjah.